5. Alejarse de la gente para hablar por celular.
4. La presión que significa elegir más de dos gustos de helado.
3. La incertidumbre de no saber si dijeron tu número o no en una farmacia.
2. Dos tipos de personas: las que llegan a una reunión social y saludan a todos, uno por uno, y los que incurren en el cliché de decir "un saludo general". Ambas repudiables.
1. No saber que cara poner cuando te cantan el cumpleaños.