Siempre habrá algún caído del catre que se descostillará de risa con cualquier gansada que vayamos a decir. Pero hay cosas, ciertos comentarios que otrora resultaron inovadores, que ahora, no pueden decirse más. Su fecha de vencimiento expiró y a esta altura, ya se convirtieron en cliché. Son estos cinco, así que si no los dijiste, alpiste.
5. Que te gusta el cine iraní. A fines de la década del noventa, este era un latiguillo que en ciertos círculos sociales podía llegar a garpar. En estos días, ni a un fanático/a de las películas de Hallmark le sorprende este comentario.
4. Que cuando prendés un pucho viene el bondi. Si Seinfeld estuviese muerto (Dios no lo permita por favor) se revolcaría en su tumba si escuchara esta remanida y ya agotada observación de la realidad.
3. ¿De qué signo sos? Y pensar que cientos de salames, en plan de conquista, siguen apelando a esta pregunta que insultaría hasta la inteligencia de Karina Jelinek.
2. Que a alguien le guste comer pizza fría a la mañana. Ya nadie va a tildarte de loco porque bajonees una zapi fría en plena matina.
1. La pregunta de por qué el pato Donald usa camisa pero anda en bolas. Se hizo infinidad de veces hasta transformarse ya, en algo trillado. Pero esta observación, devenida pregunta, sigue siendo muy buena. Si bien primero habría que cuestionarse por qué habla, y por qué lleva camisa, esto de no usar pantalón es muy raro. Aunque viniendo de un inescrupuloso como Walt Disney, no me extraña.
Mención honorífica: Decir que Harrison es tu Beatle favorito. George era el más místico, el de perfil más bajo y el que metía pocos temas en los discos. Pero esas canciones, le peleaban mano a mano a las de John y Paul, y a veces hasta las cagaban a trompadas. De esto se dio cuenta mucha gente, lo cual hizo que muchos más se avivaran que quedaba bien decirlo, y todos esos sujetos transformaron a esta elección en un lugar más común que la costanera.
viernes, 16 de enero de 2009
domingo, 11 de enero de 2009
Cinco grandes canciones de 2008.
Y pensar que ayer nomás estábamos cagados en las patas porque creíamos que el efecto Y2k iba a descuajeringar nuestras computadoras. Pensar que mirábamos por la tele a ver como recibían el nuevo milenio en todo el planeta y mirá ahora. 2008 se fue y ya estamos pisando el final de lo que será la extraña década del 10. Pero así como ese año se fue, dejó para siempre estas cinco inolvidables canciones.
5. Human. The Killers. Muchos esperábamos ansiosos el tercer trabajo de esta banda de Las Vegas. Tras ese sorpresivo y knockeador debut que fue Hot fuss, Brandon Flowers y compañía apelaron demasiado a la grandilocuencia y sólo aprobaron con el correcto Sam´s Town (que de todas formas dejó un clásico inoxidable como read my mind). Esta vez, con su tercer disco, Day & Age, los asesinos de Nevada también fueron al frente, pusieron tres delanteros y encima metieron este golazo llamado Human.
4. Time to pretend. MGMT. Andrew VanWyngarden y Ben Goldwasser conforman este duo que en sus comienzos sólo tocaban la canción de los cazafantasmas. El año pasado, de la mano del productor de Flaming Lips, Dave Fridmann consiguieron un debut impecable. Oracular spectacular es uno de esos discos que cierra por donde lo escuches, con influencias que van desde New Order hasta los Rolling Stones, y que además, tiene un tema como Time to pretend.
3. Supernatural superserious. R.E.M. Rapid Eye Movement se ha transformado hace años ya, en una banda grande. Pero también, de un tiempo a esta parte, los de Athens se habían puesto un cacho blandengues. Por suerte en 2008 nos cerraron el tuje a todos los que pensábamos eso y pelaron Accelerate, un disco enérgico, urgente, que nos recuerda aquellos viejos buenos de tiempos de Murmur, Out of time o Automatic for the people. Supernatural superserious, el que fue el primer corte de este último trabajo, es un gran botón de muestra.
2. Standing next to me. The Last Shadow Puppets. Alex Turner, el vocalista de Arctic Monkeys se cansó de tener éxito con su banda, entonces en su tiempo libre se juntó con Miles Kane, cantante de The Rascals y formaron TLSP. El disco de esta suerte de proyecto paralelo pasa sin pena ni gloria, pero tiene Standing next to me, una de esas canciones que parece que las venimos escuchando de toda la vida. Puede que sea por su aire retro, o porque se parezca a A song for the lovers, aquel inolvidable tema del disco debut de Richard Ashcroft.
1. Rock and roll train. AC/DC. Los hermanos Young lo hicieron de nuevo. Y obvio que hicieron lo mismo de siempre. Aunque esta vuelta, de la mano de Brendan O'Brien consiguieron un sonido más corpulento, cargado de cambios de ritmo, algo que se refleja en Rock and roll train, una gema que está a la altura de grandes clásicos como Who made who o You shook me all night long.
5. Human. The Killers. Muchos esperábamos ansiosos el tercer trabajo de esta banda de Las Vegas. Tras ese sorpresivo y knockeador debut que fue Hot fuss, Brandon Flowers y compañía apelaron demasiado a la grandilocuencia y sólo aprobaron con el correcto Sam´s Town (que de todas formas dejó un clásico inoxidable como read my mind). Esta vez, con su tercer disco, Day & Age, los asesinos de Nevada también fueron al frente, pusieron tres delanteros y encima metieron este golazo llamado Human.
4. Time to pretend. MGMT. Andrew VanWyngarden y Ben Goldwasser conforman este duo que en sus comienzos sólo tocaban la canción de los cazafantasmas. El año pasado, de la mano del productor de Flaming Lips, Dave Fridmann consiguieron un debut impecable. Oracular spectacular es uno de esos discos que cierra por donde lo escuches, con influencias que van desde New Order hasta los Rolling Stones, y que además, tiene un tema como Time to pretend.
3. Supernatural superserious. R.E.M. Rapid Eye Movement se ha transformado hace años ya, en una banda grande. Pero también, de un tiempo a esta parte, los de Athens se habían puesto un cacho blandengues. Por suerte en 2008 nos cerraron el tuje a todos los que pensábamos eso y pelaron Accelerate, un disco enérgico, urgente, que nos recuerda aquellos viejos buenos de tiempos de Murmur, Out of time o Automatic for the people. Supernatural superserious, el que fue el primer corte de este último trabajo, es un gran botón de muestra.
2. Standing next to me. The Last Shadow Puppets. Alex Turner, el vocalista de Arctic Monkeys se cansó de tener éxito con su banda, entonces en su tiempo libre se juntó con Miles Kane, cantante de The Rascals y formaron TLSP. El disco de esta suerte de proyecto paralelo pasa sin pena ni gloria, pero tiene Standing next to me, una de esas canciones que parece que las venimos escuchando de toda la vida. Puede que sea por su aire retro, o porque se parezca a A song for the lovers, aquel inolvidable tema del disco debut de Richard Ashcroft.
1. Rock and roll train. AC/DC. Los hermanos Young lo hicieron de nuevo. Y obvio que hicieron lo mismo de siempre. Aunque esta vuelta, de la mano de Brendan O'Brien consiguieron un sonido más corpulento, cargado de cambios de ritmo, algo que se refleja en Rock and roll train, una gema que está a la altura de grandes clásicos como Who made who o You shook me all night long.
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